2 de agosto de 2009

Crónicas Playeras - Puerto de Veracruz

El heroico Puerto de Veracruz es sede de muchos recuerdos míos, la mayoría de ellos gratos. Y ayer agregué uno más a esa lista. La razón por la que quiero escribir al respecto es porque en esta última visita al Puerto tuve oportunidad de hacer algo que no hace mucho tiempo no hacía... fui verdaderamente a vacacionar. Desde hace varios años la única razón por la que acudía al Puerto de Veracruz (aka Veracruz Llave) o a Boca del Río (ni ellos saben donde termina uno y empieza el otro) era para ir de compras, para ir al aeropuerto, para visitar a algún amigo, o simplemente de paso. Es por eso que me sorprendió bastante la decisión de ir a Veracruz a descansar en el hotel, a tomar sol, nadar y recorrer el malecón.

Pero peor fue la sorpresa que me llevé al ver a todos los vacacionistas (osease, chilangos) haciendo de las suyas en tan bella ciudad. La estancia en el hotel se vio poco perturbada por dichos espécimenes humanos. Las plazas comerciales no se veían tan llenas. Bueno, no todas. Hace una semana apenas fui al Puerto a presentar un examen y al salir tuve que esperar en Plaza Acuario a que me recogiera mi padre. Ahí tuve que soportar el mar de gente de la kilométrica fila del acuario, la fila del museo de cera, las señoras que chachareaban, los niños que venían de la playa y ahora (todavía con traje de baño) se mojaban en la fuente, y por último (pero no por eso menos notorio) tuve que soportar el maldito olor de bloqueador solar barato mezclado con sudor. En esta última ocasión me encontré en la Plaza de las Américas de nuevo a una gran cantidad de gente, pero era la gente que iba a abastecerse de ropa engañados por las falsas promesas de los descuentos y las mensualidades sin intereses.

Durante un paseo por el malecón en la noche era bastante fácil identificar a los foráneos de los lugareños. Mientras los residentes del Puerto usaban el malecón para hacer deporte (correr o andar en bici) los foráneos hacían todo tipo de monadas. Un grupo de niñas con la ropa mojada por el traje de baño posaba para una foto sobre una bicicleta para 4 personas. Por otro lado un papá parcialmente ebrio y con la pansa de fuera alejaba a sus hiperactivos hijos con una nube de burbujas. Más adelante un grupo de señoras en pareos demasiado reveladores elegía souvenirs hechos a base de conchas. A un lado unos niños insistían a sus padres que les compraran ese granito de arroz en el cual un señor amablemente había pintado su nombre. Mis respetos a ese señor por esa habilidad para pintar y para aguantar tanto vacacionista tacaño. Al mismo tiempo que todo eso pasaba, un grupo de extranjeros se subía a un trolebús lleno de luces de neón y con música movida... al mientras que otros extranjeros algo tomados bajaban por el otro lado del trolebús. El olor a fritanga y aceite quemado llenaba la atmósfera mientras un grupo de jóvenes tocaba música tropical a las orillas del mar. Todo mundo parecía estar bastante contento.

Las playas son una historia algo diferente. Bebés en calzones jugando en la arena mientras sus madres nadan en el mar usando lo más alejado que se pueda imaginar de un traje de baño. Las muchachas nadando en el área de "Cuidado, zona de pozos" para poder ver uno de los 83 partidos de futbol playero organizados por los vacacionistas. Entre cancha y cancha se ven varias casas de campaña (con toallas en el techo) con anafres a un lado y camionetas estacionadas. Y donde queda espacio, hay varias mesas con sombrillas donde pues disfrutar de unas cagüamas bien frías. A lo lejos, unos palos con unas toallas cubriendo la letrina improvisada.

Me alegra ver que el turismo en el puerto siga floreciendo a pesar de tanto tiroteo y asesinato que ha habido en los últimos días. Aunque según el tío Fidel en Veracruz no pasa nada. ¡Claro que para él no pasa nada! Si se la pasa de evento social en evento social. Gente que vive en el Puerto me ha contado como cada tercer día se encuentra una cabeza o restos de un cuerpo en la basura. Y el resto de los días algún coche vuela en pedazos o hay tiroteos hasta en las plazas. Pero claro, en Veracruz no pasa nada. Todo con tal de quedar bien y de que gente llegue a las playas a llenarlas de basura. Peor bueno, dejemos la Nota Roja para los periódicos y las críticas políticas para Dayanna.

Lo único que me queda es esperar que la gente eventualmente se de cuenta de las chingaderas que va a hacer a otras ciudades en temporada de vacaciones. Bien dicen que con el ejemplo se enseña... yo por eso no tiro basura... jejeje.

5 comentarios:

  1. y lo dsifrutaste?
    digo puras quejas y quejas.. pero no dices si fue chido o no!!

    anyway.. disfruta tus ultimos dias!

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  2. jeje, pues Veracruz es uno de los lugares que quiero visitar, pero ya con tu reseña de los visitantes, mas lo bonito del ambiente, ya no se si ir :( jeje

    Pues en cuanto haya oportunidad (que al menos no sera en el corto plazo) espero visitar Veracruz =)

    (Btw, y nomas como sugerencia y/o comentario) A la hora de "firmar" mi comentario, ¿habra formar de yo poner los datos manualmente? Por que la cuenta de blogger no la uso, y el OpenId nunca lo agarra :(, pero si no.

    Saludos, ah y como dijo Tritza ¿Si te la pasaste bien? xD

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  3. @Machin
    Pues ya cambié la configuraciones de los comments
    y sea lo que sea... si te recomiendo visitar a Veracruz (cuando no esté tan lleno de preferencia) porque si es muy bonito
    de mientras pues te dejo este link con fotos muy buenas del Puerto y ciudades cercanas

    http://veracruz-llave-state.blogspot.com/

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  4. Ay, Dios!!! Ese tormento se vive cada temporada vacacional o puentes >.<

    Lo mejor es cuando se va toda la manada!!! Ah, qué alivio!!!

    Saludos!

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  5. eres un pinche nefasto,mamon y estúpido, llévatela relax y disfruta lo bueno

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